CUMPLEAÑOS FELIZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZ

Hola queridos ami@s

Así como dice hoy es mi cumpleaños y ya que estaba sola y me aburría decidí hacer una pequeña historietita XD

He avanzado más con el último libro del a trilogía y estoy apuntito de acabarlo, he estado muy atascada pero al fin he conseguido seguir adelante. Mi suerte me ha vuelto a sonreír cuando me pongo la vacuna para evitar la gripe e inmediatamente me da catarro, llevo unos días con una moquera impresionante, pero ya no me quejo.

Así que solo paso a saludar y a avisar que me ago un año más mayor, (pa mi llegar a los 18 fue un sufrimiento a partir de ahí todos los años me hacen sentirme vieja XD)

Un besazo a todos y gracias a los nuevos integrantes que leyeron mi historia y les gustaron un gran beso a todos y felicidades a los que cumplen el día de hoy!!!

La autora y los personajes

Dormía plácidamente en mi cama el domingo de mi cumpleaños. El catarro me había mantenido en noches angustiosas en las que me era difícil respirar por culpa de la nariz taponada.

Dando vueltas en la cama por enésima vez sentí una presión en mi hombro. Gruñí intentado deshacerme de la sensación pero esta no paraba así que probé a girarme otra vez.

Más despierta empecé a notar más el golpe como si alguien me zarandeara y empecé a escuchar un sonido como una perdida de aire intermitente. Frunciendo el ceño intenté adivinar que demonios pasaba y si eso era un sueño raro. De repente sentí un golpe en mi cabeza y me puse boca arriaba en la cama abriendo los ojos.

Varias figuras negras rodeaban mi cama y se doblaban sobre ella. Asustada salté sobre la cama y me encogí contra el cabecero encendiendo la luz y buscando a tientas el cuchillo militar de mi padre que guardo en la mesilla.

-¡JODER! ¿Quién coño sois? ¿Qué queréis?- Me rodeaban muchos hombres y todos ellos me miraban fijamente.

-Venimos a felicitarte.- Contestó un chico sonriente flanqueado por otros dos.- ¿No sabes quienes somos?- Incapaz de decir nada intentado controlar a tantos hombres miré al chico detenidamente.- Vamos usa tu cabeza, piensa- Intentado idear un plan para huir sin éxito me fijé en los ojos verdes del chico. Luego miré al rubio y al moreno que tenía detrás.

-¿Tomás?- El chico sonrió y se alzó.

-¡BINGO!- Incrédula miré a todos aquellos que me rodeaban.- Mira que te ha costado y eso que tú nos has creado ¿he?

-Darrick, Ryan, Gared, Ara, Alastair, Taylor, Raudel… incluso tú.- Señalé al personaje y este puso un dedo en sus labios.

-Shhhh yo aún no he salido en los libros. Calla.- Miré a cada uno de mis personajes sorprendida y sonriendo al ver que era totalmente como me los había imaginado.

-¿Por qué estáis aquí? Mejor ¿Cómo es que estáis aquí? –Tomás se sentó a mi lado en la cama y sonrió.

-Ho bueno, como sabíamos que estarías sola en la mañana de tu cumpleaños hemos decidido venir a felicitarte.- Alzó la mano y señaló a los nuevos inquilinos.

-¡Pradesh!- Saludé al Gran Rey efusivamente mirando su belleza casi femenina. Le acompañan sus gemelos y como no, su guardia y el hermano de los gemelos.-No cabéis en mi habitación.- Reí.- Sois demasiados.

-La culpa es tuya por tener una habitación tan pequeña.- Se quejó Taylor mientras se subía a los pies de mi cama.

-Venimos a felicitarte y a decirte unas cuantas cosas.- Gared se puso a mi izquierda sonriéndome.- Pero primero lo primero.

-¡FELICIDADES!- Todos gritaron al mismo tiempo mientras los gemelos sacaban una tarta de algún lugar y tiraban las serpentinas.

-Gracias. Esto es emocionante.- La tarta fue puesta delante de mis narices para que soplara las velas. Gared la sujetaba por un lado y Tomás por el otro.

-Ahora sopla y pide un deseo, rápido que esto pesa.- Tomás empujó. Miré a todos mis personajes y cerré los ojos pidiendo un deseo para mi familia y otro para mí antes de soplar. Los aplausos me rodeador y miré con felicidad a mi alrededor.

-Esto es emocionante, puede que sea un sueño y refleje mi locura pero es impresionante.- Reí y contemple a mis chicos antes de mirar una vez más a Tomás hipnotizada por los ojos que le había dado.

-Bien, ahora nuestro mensaje.- Sonrió y extrañada miré a todos que empezaban a reír poco a poco.

En unas décimas de segundo Tomás y Gared empujaron la tarta y me la echaron a la cara mientras me gritaban “ESCRIBE” y escuchaba la risa de todos los de la habitación mientras caía hacia atrás por el peso.

Al levantarme en busca de aire miré que estaba sola y jadeé en mi sueño probablemente por la fiebre del catarro. Limpié el sudor de mi frente y me incliné sobre una mesilla para buscar un pañuelo cuando mi mano tocó algo entre las mantas.

Todo había sido un sueño, un muy agradable sueño de cumpleaños. Aun así estaba de acuerdo en que debía ponerme las pilas en la escritura y mientras contemplaba la vela del numero dos entre mis dedos sonreí. Al fin y al cabo solo había sido un sueño, o no.